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La matacía en Aragón, una tradición viva

festa tossino albelda

También conocida como matanza, mondongo o matapuerco, es una actividad de larga tradición en todo el territorio aragonés. Antiguamente, a lo largo del invierno, se sacrificaban los cerdos que se habían ido engordando durante el año para obtener alimentos contundentes que ayudarían a pasar mejor la dura temporada invernal.

Las faenas de la elaboración del mondongo contribuían a unir los lazos familiares y de amistad, ya que vecinos, parientes y amigos, se ayudaban mutuamente en esta laboriosa tarea, a la vez que compartían copiosas comidas. La matacía era por tanto un acto social, motivo de fiesta y reunión.

Con el paso del tiempo, ha perdido su importancia tradicional y muy pocas son las casas que lo practican aún de forma doméstica. Sin embargo, coincidiendo con este declive popular, está creciendo como elemento turístico y diversas asociaciones y ayuntamientos se esfuerzan cada año en conservar y difundir la tradición. Si te apetece participar en una de estas jornadas festivas, a lo largo del mes de enero tienes varias citas en el calendario:

Otras de las localidades en las que se celebra son: Bierge, Colungo, Estadilla, Alquézar y Loscorrales, en Huesca; Formiche, Gea de Albarracín, Valderrobres o La Fresneda, en Teruel; y Nonaspe, Fuentes de Jiloca, Villarroya de la Sierra, Villanueva de Jiloca o Murero, en Zaragoza, son algunos de ellos.

Festa del Tossino de Albelda
Es una de las más multitudinarias y se convierte cada año en punto de encuentro de miles de vecinos y visitantes. La organización corre por cuenta de la Penya ‘Lo Magré’, que ofrece una jornada festiva repleta de actividades donde la gastronomía tradicional de la zona es la protagonista indiscutible.
La fiesta comienza a las 8 de la mañana con una chocolatada y continúa con el asado de carne a la brasa acompañado de picada de ajo, perejil y aceite. Sobre las 10.30 se puede asistir en la Plaza Mayor al acto tradicional de la matanza del cerdo y la elaboración artesanal del mondongo. Al mediodía tiene lugar una gran comida popular en la que se ofrece la típica olla “barreada” acompañada de fruta de La Litera y café de “topi”. Además, a las 12 de la mañana se celebra misa cantada con la participación de la Rondalla San Roque y la tarde culmina con una sesión de baile popular.
A lo largo de toda la jornada se puede disfrutar de los casi 80 puestos que forman el mercado, centrado fundamentalmente en productos alimenticios artesanales. La gratuidad de los actos y el ambiente festivo hacen de este día una cita obligada.

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